Desde que te conozco soy malvada. Desde que te conozco a través de la piel, ese reducto de poder que nos envuelve, la explosiva autoridad interna que exige abrazos, desde ese momento, me he vuelto cuervo sin ojos, estómago eterno. Y sólo pido besos y sólo bebo “tú”.
Desde que te conozco estoy más cerca del manto real del sueño y es real el dolor que infrinjo, porque es el mismo que ha causado tu ausencia. El dolor que sabe del no-retorno, el que conoce lo que significa “pérdida”, al que recurro en silencio tratando de anudar días como flechas.
Ahora y la exigencia demostrada, que sonríe lánguida ante la perfección que me rodea.
Ahora y el sudor lento de verano, los ojos del deseo, goteo de estrellas en la cama.
Desde que te conozco estoy más cerca del manto real del sueño y es real el dolor que infrinjo, porque es el mismo que ha causado tu ausencia. El dolor que sabe del no-retorno, el que conoce lo que significa “pérdida”, al que recurro en silencio tratando de anudar días como flechas.
Ahora y la exigencia demostrada, que sonríe lánguida ante la perfección que me rodea.
Ahora y el sudor lento de verano, los ojos del deseo, goteo de estrellas en la cama.
2 comentarios:
Hola giralima,
De vez en cuando mis ojos se cuelan por este blog en busca de buena lectura. Fue un placer verte el otro día nena (en el documental, el rumor de la arena). Estás guapisisma!
Oye! A dónde te vas?
Besos,
La parisina que también se va y tampoco sabe a donde
parisina! qué alegría leerte y qué alegría habernos visto en el docu!
espero encontrarte el año que viene por madriz-capital-gris. estaría bien tener más tiempo y más calma...
oye, tu blog está abandonadillo eh? jeje
un besito enooorme y disfruta del veranete!
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