19 julio 2008

verborrea muda

Qué tengo que decir
Cómo rellenar de silencio los vacíos de tiempo
El banco de peces sordos chocando contra piscinas
Intervalos difusos en la melodía de la radio

Qué quiero decir y elijo
Como cincuentona en rebajas
Que si un cuarto de kilo de ternera
O dónde guardé aquellos años de vida
Traspasando bajos fondos de alacena

Dentro del bote de cola cao
Subsisten los ahorros de mi infancia
Los que no pesan ni sirven, siquiera,
Para que los robe nadie

Todos ellos me sangran ahora las encías

Qué tengo que decir
Ante la incontinencia de la lengua bífida guareciendo verdades
Incomprendido antónimo de esconder embustes
Y actrices callejeras ganando monedas en la esquina

Tendré que restregar con jabón y cepillo
El paladar selecto que me anida en la cueva
La acepción del buen gusto que llamarán “políticamente correcta”
Quienes no conecten con la belleza del instante que todos vemos tan distinta

Qué me queda en la recámara,
Que ahora sangran las encías

Llegando como instructor de vuelo
El líquido rojo sobre esmalte blanco
Navegando en calcio independiente
Que sólo abre la boca para saltar sin paracaídas
Por el borde de los labios

Qué quiero decir
Sino que a veces deseo la mudez como aliada
O quebrar las cuerdas del arpa con tijeras de voz de sastre

Sucumbir a la timidez veloz y rauda
En vez de perseguir palabras y parir fonemas con avidez de cuervo

Quizá debería ser mejor pirata
Colocarme bien el parche y hundirme a tiempo con mis tesoros
Justo antes del naufragio
Pero ni siquiera aparece en proa una triste bandera negra
Con calaveras de ironía asomándose al mástil cuando sube la marea

Qué tengo que decir a esto
A no distinguir como bucanera de mis mares cuando es tiempo de cosechar silencio
Sola y a bordo de mi acordeón caliente
A no memorizar los ciclos de viento que me sopla en las velas
Y me empuja hacia libertad de yodo
Cuando me esclaviza con grilletes y huracanes

elecciones generales

No quiero ser una gran mujer
Si por grande entiendo todo lo que escapa como río
Y lo que me estanca en pantano de emociones

Naturaleza de los pasos zambos que camino

No quiero ser la gran mujer que,
Rascacielo en mano,
Se disuelva en el bullicio de la vida

Sí la enorme mujer del detalle en la ventana
La que lave sábanas al sol
Y de cuclillas en la cama te arrope de besos las ingles

Gran piel como techo bajo el que amarte despierta con la mente

No quiero ser la gran mujer que divida la “u” de “causalidad”
Sí aquella grande resbalando en su tobogán de cuento
Del azar colonia que te aspira lo más profundo del cuello
Saltando en los muelles de tu nuca como noria en navidades

La gran mujer de tu vida
Esa sí quiero habitarla
Porque anhelo encarnarme en la niña y la pupila que mires
Y descanses en mi iris, mi arco y todas las nubes que pueda sorber para darte

Esa es la mujer que envidio
Porque las demás están al alcance de mi mano
Sobre mis muñecas de esclava de día

La otra reside en tu cuerpo
Tan ajeno al mío
En el que me sumerjo como si el agua que te forma
Fuesen densos vasos de miel que embriaga

Mujer en primera persona escribiendo el guión de los inmortales
Del amor de filmoteca
Te guardaré los recuerdos de minutos juntos
De cruzar abrazados la calle
Comer helado en el suelo
Veladas de caipiriña y azotea

Recuerdo de rutas que alguno desconoce
De esta que es nuestro camino electo
A pesar de la ensalada de adoquines a distancia
Que comemos a diario

Te guardaré letanía de los versos con un paseo en tu cintura
Sintiéndome toda chocolate por dentro en derrame de carne
Que sigue
Y seguirá
Derramándome entera

carta

A los que me vieron nacer
Y no supieron cortar el cordón umbilical que me ata a la vida
Les pido perdón por hundirme y ahogarme sola

En la laguna del llanto
A los que me dieron tierra fértil y ausencia infinita
De voz y voto
Quiero regalarles un trocito de mi cielo
De la bondad que anida dentro
Bañándome de blanco las paredes viscerales

Que parece que comulgo cada mañana
Vestida de inocencia con un cirio entre los labios
Que parece que no llego a aislar nunca
Los continentes que desbordo
Cuando pienso en mis padres
Y en cómo los caminos son sólo rayas
en un mapa de carreteras nacionales que reinvento cada día

Como aquellos pasatiempos que alguna vez hicimos juntos de pequeña en vacaciones
De líneas entrelazadas que hay que seguir hasta encontrar la salida correcta
Sobre fibras de papel y tinta

Pero es que
No paro de preguntarme
Si acaso existe alguna
O si todos los escapes y puertas de emergencia son válidos
Y menos da una piedra que perseguir las intuiciones

Todo podría ser más fácil si esas vías de fuga
Pudieran, como en los entretenimientos del suplemento semanal,
Plegarse unas sobre otras
Derramarse para formar alternativas en los pasos
Y poder volver a placer hacia atrás
O al principio de las cosas

Porque me visteis nacer y crecer
Siempre mordiendo el mundo
Y siempre pidiendo con la lengua triturada
De ingrávida ansiedad
Comprended que algunos estamos hechos para no ser nunca
Para reinar en el orbe de las luces
Y todo aquello que no pesa,
Por los siglos de los siglos o todo el espacio vago
Que nos pueda durar una cerveza o dos libros a solas
Por el tiempo como extensión del cuerpo y la cama que siente en paz

Comprended que en el fondo
El hielo no es más que agua en cárcel
Que todas las ramas vienen de la misma raíz
Del mismo modo que la montaña se dirige a una única cima

Porque no podemos sentir la unión
Cuando impera la fotografía inhibida de sonrisas necias

Porque me visteis nacer y ni yo misma sé qué implica eso
Ni si todo fue una farsa, un teatro de hospital
O una pesadilla en plan atraco a mano armada
Que ahora me empuja a aceptar lo bueno, malo y regular
Sin protestar ni decir ni mú
Como si me encontrase permanentemente
Ante el plato de acelgas del comedor del colegio
Balanceando las piernas y mirando al reloj
Hasta que termina la hora del recreo para los demás niños

Dadme una tregua en mis anhelos
Una maza para romper con aplausos
,El frío cemento que tenemos en el salón
Y el glaciar que palpita entre habitaciones

06 julio 2008

encorporación



Porque la felicidad no se encuentra en el camino

Sino que el camino es la felicidad

Así me derrito entre brazos que me pueden

Como chocolate de verano

O idea vana

Cabalgando en torsos de hiena


Así y ni un orgasmo más envenenado

En el plástico de tendón de hombre

Palpitando venas y más venas

Sangre y más sangre bajo el lavabo

Letal acuífero de carne

En el que relamo sexo en ciernes

Apto para todos los públicos


Tan púbico como mi grupa

La cintura que anda sola

Sinvergüenza por la calle

Que ya no temo levantar los brazos

Si peso poco como broza

Queriendo ser libre


Vello del vientre

Bailándome en agua

El desafío del bíceps

Aferrado a la nuez

Para ahogarme, sin piedad,

Aullidos que muerden

Y bombas de lengua


¡Qué alegre

Saltaría

Sobre tu palacio y cabaña

Sobre lo viril de tus ojos

Y el yang que me viola

Lejos de los gritos!


Enóloga de saliva

Para catar el paladar que te cubre


Me atrevería como tobogán celeste

A vendimiarte en mi viña

Exprimiéndote la carne:

Opresora de los muslos,

Capataz de tu cadera


El latifundio del pecho

Me llama “Sopor” a tientas

Me gime la pira de vagina ilustre

Mordiéndote por dentro

Que tengo hambre de años

Y quimera de siglos

Cautiva en las piernas


El camino es la felicidad

Cuando aferro las lianas morenas

Como serpientes de tu cuerpo


Plexo solar que me riega de luz

Al profanar, cual arqueóloga en bragas

Las tumbas de tu alcance

Y el matiz de los intentos


Sepultaría

Cercana y hechicera

Sarcófagos para abusarte

Y secuestro de bálano tenso

Por mi boca de pez que tráquea


Felicidad se escribe muda

Sobre el camino de tus huellas

04 julio 2008

de foto



Sé mi cuadro
El lienzo decorando el dosel de la cama
A los pies del sueño

Enredaré los dedos en tu pelo para desasirte transformando libertad

Sé mi cuadro
Porque ya has sido el escaparate de anuncio
Que no quiero perder al llegar las rebajas
Los bikinis y las sombras

Porque mi capricho
Insiste en conservar lo puro
De la primera impresión
Que ejercí como editora
Resumiendo tu principio
Un despertar de relieves en cadena
Surgiendo de celulosa plana y cuadernos de intuiciones

Te salpiqué
Nos bañamos juntos

Y no sé cómo se agitó la varita mágica de los colores
Para darte vida en mi escenario
Para hacer que saltaras de la pantalla
Como Jeff Daniels en la Rosa Púrpura del Cairo
Y germinarte el alma en mi galería de arte público

Accidentes geográficos
Que voy acopiando en tu cuerpo
Mientras vadeo con pies de sherpa
Nuevos valles renaciendo a lo lejos en el vientre vedado,

Montaña del designio que me escucha

Estoy aprendiéndome tus bosques
A base de recolectarme en ellos
Porque cada vez que te miro descubro una nueva piedra,
Otra hoja de árbol extinto que antes del café no estaba ahí,
Más naturaleza viva que aparece en tu rostro
Mientras hablamos mirándonos de frente

Emerge una cueva,
Dos marismas,
El golfo de la amargura desterrado
Hasta incluso sin sentirte al lado
Continúan floreciendo bahías
Como pinceles respirando el viento

Cada palabra que te brota, recrece las raíces
Cada gesto, alimenta la textura
Ya irreconocible
De la tierra que te forma
Rellenando el boceto inicial
Para lograr la proporción áurea

De paisaje sereno que me fluye
Y expande hacia el infinito estas líneas de fuga
Que tracé con talento la primera noche contigo

Noche de semillas
Que no paran de crear islas y puentes entre islas
A medida que me aprendo todas las nuevas especies marinas
Que surcan tus meridianos,
Animales de bestiario
Y del safari de los cuentos

Sé mi cuadro de Pangea hecha ciencia
Para cerámica de los dioses
Sabré formar como alfarera de lo informe
Vasijas para almacenar amor
En tiempo seco
Convertir mis labios en acequias
Que rieguen tus grutas
Deslizándote el agua con la boca
Bebiéndole de ti al Tiempo

Esponjas de realidad

Y trozos de metal
Y caucho
Nuevas técnicas plásticas
Seguirán sombreando las aristas
Para reinventarte en mi museo
De prismas líquidos a diario


Quién no quisiera descubrir tus ojos
Como turista cámara-en-mano
Por la Rambla de Barcelona

querer y poder

quién me dice que no soy aguamarina que renace
en la crisálida de blancos o mi retina al mirarte
como ausente
y al sentirte, latente
desde las diagonales y paralelas calles
que me trazas al cuadrado
envolviéndome entera

toda yo descalza

como si mi ser fuese un círculo de vías
y callejones errantes
en los que hubieras vivido siempre

aquí,
en el barrio de los inconformistas
(que algunos zonzos llamaran mendigos)
pidiendo,
pidiendo emociones

ahora,
en la glorieta de mi ombligo
y tú con el código de circulación en mano
recorriéndome sin prisa
yema a yema
las paradas de autobús
y plazas solas
que anegan mi espacio
en este asfalto de piel que suda

quién me dice que no soy súper heroína
paseando en tu azotea
sin que nadie percate mi presencia
bailando en brillo con traje de cuero negro
y dos ojos relucientes en la noche de gata

quién me dice
si puedo ser quien sea
una lakshmi de cien brazos
como vidas
para vivir contigo
o evocar los mordiscos de aire que me das
en cada verdad y cada beso

en cada señal que escapa del cemento
para guiarme como plastilina por tu centro
de volumen sagrado

quién me dice qué es el miedo
sino el titubeo de los golpes
que no tienen porqué darse

cómo descender
sin llegar a tocar el suelo

que me digan

que me digan cómo