21 diciembre 2006

Y más esquimales...

Este poema es de mi amigo David Gimenez. Él también estaba pensando en blanco esquimal cuando lo escribió. A lo mejor incluso escribíamos estas líneas en el mismo momento, porque el caso es que ninguno de los dos le termina de encontrar mucho sentido a esto de los colores y de dar forma a las palabras...



POEMAS DEL FRIO


En vano te hemos prodigado el océano,
en vano el sol, que vieron los maravillados ojos de Whitman;
has gastado los años y te han gastado,
y todavía no has escrito el poema.
Mateo, XXV, 30. Jorge Luis Borges


Dicen los nuevos poetas:
el pingüino diecinueve
me mira con ojos grises
y se rompen las pateras
cargadas de desdicha,
y sueñan los árboles, y te golpean a rajatabla.
No es nada nuevo
el viento y la estela del último barco
endemoniado de raíces
turcas y otomanas, alegres.
Dicen los últimos poetas:
ojo con el tiempo
el oro y mi dios.

Los esquimales distinguimos hasta treinta tonos de blanco.
Y los nombramos.
Hay músicas blancas, y noches blancas.
La foca blanca ardió en la madera
del blanco fuego. En el medio de toda la blancura.
Cielo blanco, lluvia blanca.
Algunos blancos sentimientos.
El alma blanca del oso polar. Todo blanco.
La foca monje, con blancos colmillos, dientes como perlas,
metáfora del blanco.
Puñal de filo blanco. Arpón blanco. Cuerda blanca.
Para la sangre roja, luego helada y blanca.
Todo es blanco en Scagerrat, Kategatt y Suntt.
Todos los blancos, pues, no son iguales.
Madera blanca, pescado blanco.
Blanca pena, como alegría sana y blanca.
Blancura de pensamientos en el alba del frío.
La nada es blanca. Y la capa de armiño es blanca.
Como las blancas ballenas.
Del mismo color blanco que la piel de morsa.
Los esquimales, distinguimos hasta treinta tonos de blanco.
Y los nombramos.
Yo que fui sonero, y que como los poetas
no usaba la mayúscula, ni el estrambote,
yo reverso de la carta, viajé a Finlandia,
para colarle un gol a la aurora boreal.
Tanto, tú no le metes un gol, nialarcoiris.
Pues ahí lo tienes, cuando más blanco estaba
y me miraban los niños, como diciendo éste que hace,
me driblo a un trineo, le hago una gambetta al último oso polar,
y va Innuk, y se come el bote, del roteiro, (quesunnombredebalón),
y le digo, tiraaaa, chúpate esa,
y me pongo a gritar gol, desde todos los idiomas,
goal, digo, en voz en alta, y la gente muerta de frío,
o de risa, que en estos países es lo mismo,
y les digo en finlandés, quesunidioma, “salmón ahumado”

Me encuentro sólo.
El último amor se fue con la prosa,
con el verbo y el alcanfor.
Haces poemas congelados! –me gritó.
Era por la noche de las carreteras.
Era, también, la última noche de Diciembre
-oscuridad de bombillas y tintineos-.
Me dejó un pañuelo de seda
y unas llaves que tirar.
No puedo con los poetas fríos- susurró.
Desde entonces no apago la calefacción,
por si vuelve.
Siempre escribo de palmeras y
batidas de coco, de asuntos cálidos;
y me llamo Brian, como antes.
A veces, en rebeldía, declamo:
“Témpano de hielo, tarde fría”.

19 diciembre 2006

blanco esquimal


Blanco me rodea más que hojas hirviendo,
más que paseos en triciclo por nieve que gotea.
Blanco me come con una avaricia que no es la del negro,
que es más lenta y blanca,
que todas las pulpas de fruta en mi mano.
Blanco derretido a lo largo de mi cama,
con el que duermo y me levanto,
siempre blanco, siempre eterno.
En todos los rincones y segundos, en bolsillo roto y saco vacío.
Así el blanco me enternece como al bebé que no discute lo que bebe,
sino que asume y traga
aún más blanco,
aún más leche desdentada.

07 diciembre 2006

marea


regalando alrededor
aunque sólo ansío espacio
hilar dentro de la rueca
posible jugo sediento

regalando alrededor
cartas hechas de trapo
hueco libre en la marea
reclamo para ser pasto
sabed que entre las locuras
busco azares salados
por eso, bajel inhiesto
zozobras en mi tormenta
por eso, trémula distancia
hago eco
humo
sonrisa

reina de corazones

El símil de la vida y la baraja me resulta tan insultantemente cierto a veces... la metáfora perfecta para definir el recorrido de la suerte con carteles luminosos. La vida es o bien como una caja de bombones o bien como una partida de cartas. Pueden elegir ustedes la comparación que prefieran, pero yo me quedo con el sinsabor implícito de estas últimas, porque, al fin y al cabo, siempre puedes elegir otro bombón de la caja pero nunca puedes cambiar las cartas obtenidas por azar. En la primera metáfora hay opción, hay libertad para elegir; en la segunda, no. A partir de aquí todo depende de si eres buen jugador. No hay posibilidad de cambio.
Yo ya no sé si es que tengo suerte, si es que soy muy optimista o, simplemente, resulta que soy buena jugadora...

26 noviembre 2006

cuenta atrás

5

4

3

2

1



operándome

hoy y la soledad abrasan mi garganta
dándome respiro al azar
completando en espirales
el exquisito cercenar del cuerpo

hoy y la soledad se reparten mi corazón
disecan tristes melodías engarzadas
huellas para dos escondidas bajo la piel

hoy he dado a luz recuerdos
hoy empieza otra vida
y tu huella en mi lamento
asciende, palpita, humea

18 noviembre 2006

putas tristes, alegremente putas

dice gabriel garcía márquez que "el corazón tiene más cuartos que un hotel de putas".

03 noviembre 2006

Trip to London


londres derrocha magia con las manos abiertas... el sitio acertado con la gente acertada, nada puede salir mal, no?
gracias por los recuerdos. son el mejor tesoro: no pesa, no se puede perder y siempre permanece lo mejor del mismo.

¿quésecuece?

una taza de harina, media de agua y esa soy yo batiendo las alas
hundiéndome cada vez más densa
cada vez más pan en el fango de tus ojos
y es la promesa del fuego lo que me mantiene a la espera
con la impaciencia agarrada a la muñeca en este tonto jugar de niños


soy libro abierto sin recetas
galletas con imposible
tan dulce
tan deseo
tan escalera que crece con los años
decídete a cocinar mis ruegos
a ponerle el punto justo de sal a esta historia de brasa enmohecida
no me costaría llanto el descubrirte porque ya me has arrancado las pestañas
porque mirarte me ciega en la hoguera
dentro de una triste cazuela de barro

llámame "cocinera de besos"
y a mi deseo, "devenir descalzo"
llámame "tierra que llama"
y a mi pasión, "rayo que no cesa"

02 noviembre 2006

inconcluso


quiero colorearte la vida con los dedos
con esa pintura brillante que dura pocos días
que no sobrevive al exterior
.
quiero imprimir huellas en tu pecho
demostrar que a veces es mi almohada
que tu torso es reposo y temblor
.
te haría de arco iris sin flecha
pero paciente, con miedo a tu cuerpo de jaula
a que me atrape esa piel de colores
a pesar de nuestro lejano mundo
.
quiero reservarte unos días en mi cama
y pintarte con los labios, con cautela y conciencia
quiero terminar de ver cómo se vacía nuestra bolsa de palabras
rellenarla con abrazos que no existen sino en letra

01 noviembre 2006

empiezo a odiarte pero aún no sé cómo terminar...

si no fuera por la hierba mojada, si no fuera porque hace tiempo que ha amanecido y que cruzaste la calle, si no fuera porque me das miedo, te llamaría por teléfono. pero ahora no es hace 5 días. ahora no surgen los besos espontáneos. ahora no somos uno sin importarme, como nunca antes me había importado, el lugar. ahora mismo. dime cualquier lado. cualquier parte y seguiré bailando contigo. pero son las 9 de la mañana y la rave no te encuentra. mientras, yo me pierdo en ella. pobre mendiga. me dan lástima tus miradas. lástima de mendiga

no puedo seguir el ritmo
está atascado en mi cabeza
baila presente en la mandíbula
baila sobre tu cuerpo de rosa amanecer
-
no puedo seguirte los pasos
ni obviar las baldosas que pisas
por terror al vacío de tus lados
sigo llenando vida con agua estéril
sigo siendo cuerda floja
enredos y máscara de plastilina
-
dame esa oportunidad
sin focos tenues ni mano ajena en pantalón ajeno
dame esos segundos que sabre apreciar con creces
con avidez de lo que espero
más por tiempo que por herida
-
te sacaré la máscara a bocados
a rápida oleada de caricias

30 octubre 2006

soydos

apriétame sin soga, sin descaro, sé agua
odio el reflejo de mis días
y exijo palpitar ausente

Soydosunidas

apriétame con manos, con fuerza, hazme viento
podré ser regalo inútil de polvo y estantería

28 octubre 2006

tren

Mi vida viaja en un tren veloz que no retiene los segundos. Los momentos compran sólo billetes de ida, entran en el vagón y desaparecen en cuanto se reanuda la marcha. Son tan inconsistentes que se vuelven humo en los sillones y se escurren por la ventanilla hacia el cielo, perdiendo de vista las vías de mi camino...

-
Para el pedestal de tu estatua quiero velas
pequeñas luces de no retorno
lloraré la pérdida
saciaré el luto
seré viuda eterna en la memoria
-
Perdida entre estatuas de piedra y paja
que pueden venerarse sin heridas

50%

A veces ser breve es el mejor modo de completar un momento. Una sola palabra puede abarcar el significado justo de todo aquello que queremos expresar. Yo quiero encontrarla. Normalmente las suelo desperdiciar. Peor aún, las suelo manchar, empobrecer... Sin embargo ese es un camino que sólo podemos recorrer a través de las letras. En la enfermedad se encuentra el remedio.
A veces es mejor no desear nada, no vaya a ser que se cumpla. Últimamente ya tengo miedo de empezar a desear algo... Pero no puedo evitar ser una caprichosa. De nuevo enfermedades y remedios unidos. Creo que este remedio se llama "hastío". Y la enfermedad, "parodia".

29 septiembre 2006

Samsara


Sentir nuestro propio límite, no sólo el límite del cuerpo, sino la barrera que confina nuestra mente, es una sensación tan humana que me alivia saberme tan comprendida. Siempre he admirado la perfección de la naturaleza, su omnisciencia innata de la vida, en fin, esas ironías curiosas que te asombran a veces como la negación de la negación hegeliana o el significado del samsara hindú... El caso es que hoy he sentido esos límites palpándome por fuera y dentro del cuerpo, haciendo presión en varias direcciones, abordando mi pequeña y frágil embarcación con insistencia impertinente... Restricciones desoladoras de ser humano.
Sin embargo, Gea, en su impoluta y descarnada imperfección, funciona muy bien. Lleva demasiados millones de años haciéndolo sola, sin que nadie la dirija, como para que nosotros pretendamos corregirla en las últimas páginas del libro alegando nuestros pequeños defectos de fábrica. Sí, es cierto, tenemos miles de acotaciones físicas y mentales. Formamos parte de algo etéreo aunque no queramos darnos cuenta... Nos estamos creyendo dioses de nuestro destino y nos sentimos con derecho a protestar al descubrir nuestros propios límites... Lo curioso del tema, y aquí retorna esa idea deliciosa del devenir, es que esos frustrantes límites son a la vez tan desalentadores como necesarios. Tan producto de la naturaleza que no puedo evitar sonreír ante la imagen de los pequeños bichitos humanos protestando enérgicamente por algo que encima les ayuda a seguir vivos: las dificultades. Deberíamos estar agradecidos en el fondo por nuestros límites, por la oportunidad que nos brindan de superarnos... Límites que ahora me ahogan a mi por no sentirme capaz de lograr algo que deseo; límites a los que mañana tú dedicarás un segundo de resignación al saber que no has aprobado el examen; aquellos que ella maldice por impedirle viajar por amor; que provocan accidentes de coche con 2 muertos y 1 herido de los que conoces el nombre y la mirada; que te alientan a esforzarte más para obtener lo que anhelas... Límites necesarios para no disfrazarnos por completo de dioses, para podernos reconciliar con Gea y volver al seno. La frase de “dar un paso atrás para coger impulso” tiene tanto, tanto sentido en este momento...

28 septiembre 2006

suavemente

eres lento veneno y camino en la sangre
letal cauce
sin prisa recorre
-
eres único aviso de daga heroica
arma victoria y mi latido inerte
-
devenir
justo acontecer
para esta quimera del oro

26 septiembre 2006

Mi Lu

mi lubidulia
mi golocidalove
mi lu tan luz tan tu que me enlucielabisma
y descentratelura
y venusafrodea
y me nirvana el suyo la crucis los desalmes
con sus melimeleos
sus erpsiquisedas sus decúbitos lianas y dermiferios
limbos y gormullos
mi lu
mi luar
mi mito
demonoave dea rosa
mi pez hada
mi luvisita nimia
mi lubísnea
mi lu más lar
más lampo
mi pulpa lu de vértigo de galaxias de semen de misterio
mi lubella lusola
mi total lu plevida
mi toda lu
lumía

(Oliverio Girondo)

Oliverio Girondo

Se miran, se presienten, se desean,
se acarician, se besan, se desnudan,
se respiran, se acuestan, se olfatean,
se penetran, se chupan, se demudan,
se adormecen, se despiertan, se iluminan,
se codician, se palpan, se fascinan,
se mastican, se gustan, se babean,
se confunden, se acoplan, se disgregan,
se aletargan, fallecen, se reintegran,
se distienden, se enarcan, se menean,
se retuercen, se estiran, se caldean,
se estrangulan, se aprietan se estremecen,
se tantean, se juntan, desfallecen,
se repelen, se enervan, se apetecen,
se acometen, se enlazan, se entrechocan,
se agazapan, se apresan, se dislocan,
se perforan, se incrustan, se acribillan,
se remachan, se injertan, se atornillan,
se desmayan, reviven, resplandecen,
se contemplan, se inflaman, se enloquecen,
se derriten, se sueldan, se calcinan,
se desgarran, se muerden, se asesinan,
resucitan, se buscan, se refriegan,
se rehuyen, se evaden, y se entregan.


Acabo de descubrir este poema del escritor argentino Oliverio Girondo y creo que me he enamorado el doble...

19 septiembre 2006

Al fantasma

es curioso el cómo tendemos a hacernos ilusiones. De repente empiezas a hinchar el globo de la felicidad y antes de que te des cuenta es ya demasiado grande, comienza a elevarse por encima de los edificios y es imposible desincharlo si no es con una buena aguja de la desilusión. Me sonrío a mi misma al darme cuenta de mis propias historias de amor inventado y rehecho. ¿Cómo podemos a veces ser tan ingenuos para creernos nuestras propias historias? ¿Acaso no he aprendido aún a quitarme credibilidad cuando estoy triste? Parece ser que no. Pero el caso es que me resultan hasta cómicas mis elucubraciones basadas en la nada, en la simple intuición inexistente. Tengo entre mis manos un globo que lleva hinchándose unos cuantos meses a base de sueños y oráculos personales indefinidos: señales que sólo veo yo. De repente me he dado cuenta de que estoy echándo de menos a un fantasma que a penas conozco, del que sólo tengo vagas referencias y algunos apuntes mentales de días dispersos. De repente me apetece escribir sobre mi amor platónico secreto y le dedico unas líneas tangibles que ponen un punto y a parte a este devenir de sueños. El problema que esto acarrea es que en vez de hacerse más real, empieza a alejarse de mi. Demasiadas espectativas probablemente. A lo mejor después necesito una aguja enorme, pero los sueños siguen siendo gratis y tan bonitos que ya no sé qué opción es la mejor...
espero conocerle pronto y averiguarlo... ¿cuándo llegará el momento?

Comerte

quiero comerme a ese fantasma de ojos dorados
morderle despacio, exprimir sus ruegos
quiero ser vampiro de niebla extensión de humo
y llevar bajo mi capa que alumbra un cuento cada beso
quiero comerte en sueños, fantasma de mediodía
urdir con ojos abiertos la escena perfecta del crimen
el momento exacto de tu muerte a manos de mi boca
quiero que no sientas mi presencia tras la espalda
esperando el instante de tus ojos distraidos
lograr ese mordisco que mezcle nuestra sangre

18 septiembre 2006

Mentirijillas del reloj

El mejor lugar para no pensar ahora serían tus brazos. Y sé que es mentira, por eso no te culpo. Sólo me tranquilizaría tu voz helada. Y sé que es mentira, por eso he dejado de escucharme. Por eso, a pesar de una noche en vela mirando tus ojos, ni te tengo ni te quiero. Sin embargo, qué bien me sentaría en estos momentos robarte una sonrisa, guardármela en silencio en este álbum de fotos nuestras que empiezo a tener en la memoria... Me creería mi propio espejo de la felicidad a tu lado, podría jugar a que somos especiales, a que somos personas que no somos y vivimos un momento que no nos corresponde por derecho sino por destino. Entre tú y yo podríamos creernos dioses de la carne y la necesidad.
Aquí nace la disyuntiva que provoca que todo esto sea tan real como falso: la hipótesis de la duda. El no saber con certeza que es tu piel la que realmente añoro. Ya no sé siquiera qué vestido quiero. Ya no sé con qué piel vestirme porque sólo he coleccionado jirones de los otros, porque los retales que he logrado descomponen mi propio cuerpo.
Y tú estás ahora allí, en el podio de los pedazos, siendo el primero en este Olimpo de historias eliminadas e imposibles. Estás ahí en silencio y poco a poco, dándome y quitándome; jugando tus cartas con equilibrio premeditado; siendo brisa cálida... No puedo evitar sentirme tu reloj de arena y de vez en cuando, creerme nuestra farsa. Si no fuera eso, ¿por qué estoy buscándote en vela?

Cerillas

Cansada de ser vendedora de fósforos hoy descanso en la orilla. Nada me ata excepto los recuerdos y las culpas de luto velando. Hoy la orilla me consume y me ofrece su cama blanda de yedra. Me dice "duerme" y me convence con calma materna, arrastrada.
¿Dónde abandoné pedazos de mi sonrisa? Están llamándome pero sólo llegan imágenes del eco. La vendedora de fósforos para las noches frías se pasea sin abrigo.
Acabo de hablar con Nimia. Ella siempre sabe qué es lo que me pasa y me habla claro porque me conoce. Nimia siempre dice que es mejor evitar los "paños calientes" a la hora de dar un consejo. Por eso sé que tiene toda la razón del mundo cuando me mira con sonrisa cómplice y me avisa de mi actual estado de reencuentro. Según su teoría, después de una gran explosión en la que hemos ido repartiéndonos como pequeños fósforos momentáneos, llega un momento en el que necesitamos volver sobre nuestros propios pasos para cerrar círculos, para recoger trocitos abandonados que siguen llamándonos desde el pasado una vez consumidos... En verdad la explosión ha tenido que ser muy grande porque ni siquiera sé en qué paso fui diluyéndome. Demasiado dar de mi. Demasiado buscar sin abrigo. ¿Por qué no puedo evitar esa expedición por la vida? Exijo una reunificación. Una Atalaya libre e independiente.

16 septiembre 2006

me gustas

me vuelvo suave de manzana bajo tu sombra
se me cae a golpes de voz la corteza de árbol marchito
pasando frío en tu garganta que flota
que me traga sin besos, sólo al hablar descalza

tu palabra es letra fiel que traduce mi rostro
intérprete de llamas de otra tierra
mundo lejano donde duermo contigo
y mi rostro, mi envés que no te engaña

me vuelvo fruta que madura
niña que no crece
aprender con tu mirada

me vuelvo silencio roto
muñeca de trapo ajado
despertar en compañía

rayando madrugadas

sonrisa adentro por saber que tus párpados miran más allá de un sólo respiro
que tus ojos se abrirán con ilusión y luz de alba o luz de noche

sonrisa adentro y susurro que arrastra llevándome en tu bolsillo, plegada en mi propia cuna
naces de puntillas-sin sobresalto, bailándo suave de palabras

05 septiembre 2006

Panales

He visto a mi generación entera palpitar y no nacer
Morder sin alimentarse, escapar sorteando heridas
Les vi retorcer calcetines de puro nervio sentados ante cualquier puerta
Una puerta que da a una vida para la que ninguno pidió hora ni espada
Y por eso esperan su turno retorciendo inconexos calcetines
Futuras huellas en la arena que nunca querrán pisar

Quizá esperan a que Ginsberg paseando un día borracho por la calle de luces rojas
Se fije en ellos les guiñe un ojo y les invite a tomar un trago
“entra, coge lo que quieras, la vida es tuya” y un sinfín de líneas huecas
O quizá se inventan su Maga particular y desean que sea ella quien les arrastre por la vida, alejando con su risa de plata las cajas negras que consumen sin querer pero a conciencia
Todos ellos tiritan rezagados detrás de una moda con dientes de ajo
O de un coche que no pesa o de esas pequeñas cajitas que guardan todo menos aire
Todos ellos adversos pidiendo piando fuego para su nido y dinero para tener sangre
Son aquellos que odian las cadenas de comida rápida, que atracan panaderías, que plantan flores en la acera
Los mismos que desechan ocasiones saltando primero por el puente de la deriva
Agotando vida ante una televisión que no comprende a nadie
Los mismos que odiarán haber sido jóvenes y nunca niños
Miembros sin carnet de una sociedad secreta olvidada

He visto a futuras cantantes de ópera revolcarse con futuras abogadas grises
Defensoras del prozac y de la libertad de puertas a dentro, todas ellas amigas de lo eterno, de los parches anticelulíticos, de los muchachos de ojos rasgados.
He visto dos amigos que creyeron ser tres o cuatro o uno o se murieron
Y las dulces mentiras de ojos rojos en los baños
Y también a la chica loca del quinto izquierda, que se consume a sí misma
Lentamente avariciosa
Soñando robar algún día una torre Kio y sembrar el caos en la Castellana con su disfraz de catwoman,
aplastar por fin esas corbatas rayadas que crecen como hiedra
Ser la diosa de las grandes hazañas compasivas
Pero eso no se lo cuenta a nadie nunca la chica loca porque está prohibido hablar de los sueños
Ni siquiera a los jóvenes de pelo largo que se enredan en las farolas, que se abrochan los pantalones tras haber vomitado esa noche en algún rincón de Malasaña
A ellos, además, tampoco les interesa.
Son demasiados para ir juntos, muy pequeños para alimentarse
Lanzan gritos de escape dentro del portal cerrado, paredes sin grietas donde se encuentran porque están aislados
Y defienden la noche como evocan el día, todos ellos, todos solos
Salen en busca de colmillos nuevos y una tarta que morder
Sin avergonzarse de sus pupilas dilatadas trémulas a base del café de las 8
Eligen labios azules, manos tatuadas, sonrisa de MDMA puesta en la frente
Eligen dorados bares donde poder esconder las piernas bajo la falda y los billetes por los que lloran en el escote
Saquean sin mirar en las rebajas de emociones, se perdieron las mejores ofertas que les prometían caminar libres, desoyeron los consejos más oportunos

De todas las generaciones la más perdida y la más hallada
Como todas vocea su patente exclusiva, cuelgan carteles oxidados del cuello
No comprende aún de rostros borrados que miraron hace ya tiempo por sus ojos
No comprende que una tarde sin sol es la misma tarde en pieles cuarteadas
Y añoran todo aquello que aún no conocen y tiemblan al ver la luz del día

03 septiembre 2006

Báilame En Agua


Quítame los zapatos tristes porque esta noche hay baile en mi plaza
Llevaré un vestido rojo cubriendo leves faltas y desecharé pecados abriendo más las piernas
Pon las medias tras el espejo, que esperen solas deseando ser espías, viendo tras lo invisible el baile que no cesa

Esta noche hay baile en mi plaza
Y las farolas de mediodía comienzan a alumbrar la calle
Esta noche vendrán los sueños, los adioses, dioses y amigos
Habrá música de hojalata para verbenas sobrias
Algo de picar para los más cenicientos y contar cuentos en las terrazas

Dame la mano, tú que regalas tiempo
Te invito a venir si alargas las horas

02 septiembre 2006

Mordisco al asfalto



Demostrar el hambre es la mejor forma de obtener sustento. Abrir la boca patentando las garras carroñeras de la vida con la firmeza que da la autosuficiencia. Dentro de la jungla, saciarse uno mismo. No depender del entramado de supermercados fáciles, de restaurantes que le quitan todo el interés a la verdadera esencia del superviviente: cazar en la ciudad. Hoy salgo a la calle dispuesta a descubrir qué placer y sacrificio me reporta ser depredadora desde el estómago.

29 agosto 2006

¿Dígame?

Toc toc... me da un miedo tonto abrir la puerta del pasado, mirar viejas fotos que me llaman dispuestas a ser feroces, a hacerme daño sin pensar siquiera en que ya están muertas... pero al fin y al cabo sigo hablando conmigo misma ya sea hace un año o desde el útero. La única reina malvada de mi reino déspota soy yo y no olvido que me corono de vez en cuando, recordando los momentos en que no era una sino muchas enfadadas a la vez. Menudo ruido de cascabeles con espinas. Poco a poco, reconciliarnos. A eso nos lleva la vida.
Hoy he vuelto a Madrid. Es el último regreso y me está dando algo así como "penita". El "toc-toc" me come por dentro y afuera escucho el familiar ruido del camión de la basura madrileño. Si es que ya son las 3 de la mañana, no sé qué coño haces aquí escribiendo, me inquiriría mi madre. Es curioso cómo se pegan al cuerpo los pequeños detalles. Cómo he regresado a Madrid y una de las cosas que me hacen sentir en casa es el ruido desgastado del camión de la basura... El último año. Toc-toc. Marcha atrás. Soy plenamente consciente de que dentro de poco esto sólo será una borrosa mancha salpicada de fotografías.

cómic de días

la vida en viñetas
te-beo de colores
y yo sin cabeza pintando monas presumidas
acariciando bocetos recién salidos de las manos

la vida como un cuenco donde vierto más que bebo
porque tiembla cerca de los labios
porque me emborracho rápido sin tiento

dibujante de líneas huecas
dibujante con prisa

18 agosto 2006

El chico que me mira...

Ahora mismo, en este mismo momento, toda mi piel huele a ti. Huele a tu voz y a ojos redondos.
Me acabo de convertir en aire que sólo aspira, que sólo sube. Porque ahora mismo te llevo como límite en mi límite del cuerpo.
Ahora te consumo para mi en mi propia copa, en mi propio suspiro sin que estés tú para decirme "basta", sin que tus manos puedan sancionar las mías. Y te absorvo en el tiempo adherido a la yema de mis dedos, allí donde tu espalda ha dejado huella, huella que tiene aroma y que habla con los sentidos.
Ahora mismo toda mi piel huele a ti, recuerda tu rastro y quiere ser la científica loca que experimente con tu olor, que sea capaz, tras noches en vela y matraces rotos, de embotellar este sutil perfume que adormece mis pupilas.
Ahora mismo se eleva y se difumina. Queda contaminado por mi piel, celosa del olfato, por el tiempo que parpadea y se extingue llevándo nuestro momento a la orilla de la memoria.

Como un Tornillo

Tengo un torbellino dentro de la piel que no me deja acercar a mi corazón.
En cuanto pongo un sólo pie dentro me expulsa con violencia: "sé paciente y de una en una". Pero es que últimamente lo hago todo a la vez...

13 julio 2006

Ítaca


Antes de iniciar un viaje siempre nos volvemos un poco niños, nos volcamos más hacia adentro. Quizá las expectativas o quizá las ganas de salir corriendo incluso sin maleta por la puerta camino de ninguna parte. Lo cierto es que lo desconocido genera una dulce ansiedad al viajero, un leve aire incierto que hace que el periplo perdure en nuestra memoria aún antes de haberlo iniciado.
Mañana me voy con un billete de ida a recorrer el verano y quiero dejar constancia de mi particular "momento niñez" antes de marcharme. Probablemente como prueba fehaciente de lo que está por ocurrir, evocando antiguos rituales de buen augurio para el peregrino.
Mañana empiezo algo que es nuevo y esa sensación de inquietud, aunque ya conocida, sigue sorprendiéndome con espontaneidad radiante. ¿Que qué espero conseguir? Mejor cuento a la vuelta qué es lo que he conseguido.

12 julio 2006

Diagonal que parte

Es curioso como la vida puede a veces darse la vuelta y descubrirte con la boca abierta ante la rapidez del devenir. Hoy he sido verdugo y víctima en dos camas. He vivido en mi boca el sabor agridulce-desencanto de ser creación y autora.
Él me ata al somier y él me quiere dejar libre, pero ninguno de los dos sabe ser el otro a tiempo. Ninguno me deshace como hielo en plato, lista para ser comida de hienas. Y, mientras, yo soy verdugo y víctima llorando en ambos papeles. Como en una película sin presupuesto en la que debo estirarme para abarcar todo el reparto.
Camas vacías con dos. Ironía del desamor herido y de aquel "posible futuro" que no se sabe si llegará. Pero no me puedo quitar de la cabeza sus ojos de agua. Y mucho menos enterrar el pasado.

11 julio 2006

Trees Te

¿Y qué pasa si no quiero morderme la lengua?
¿Si sólo quiero morder la tuya?

No puedo desmentir miradas que son reales, pero puedo hacerme pequeña, muy pequeña y esconderme de ti porque soy frágil. Porque mi diminuta dictadora de papel me obliga desde dentro a no morderte, a no arañarte, a no quererte. Da órdenes desde un púlpito de sangre "no bebas más de esos ojos, huye". Y ahora me das miedo y no te puedo rozar.

CaLoR

Lo que más duele es que me duelas. Que al entrar y salir de mi vida, en un fugaz intento de actor secundario, te quedes dentro recordándome que sigues ahí.
Lo que más duele es saber que me duele, que quisiera por un momento convertirme en verdera directora de mi vida y de la tuya. Sin derechos de autor ni cláusulas de conciencia. Me duele la vulnerabilidad de una cama vacía con dos personas, la indolencia de sábanas azules llenas de verano. Calor y despertarme a tu lado sin ti.
El peso de las lágrimas se vuelve insoportable a veces. Se convierten en piedras (vulgares o preciosas) incapaces de sostenerse en las pestañas...

09 julio 2006

vacuo


echar de menos la casa por la ventana
vivir sin sillas
sólo con-suelo

echar de menos desprender algo
echar de menos añorar nada

balcón abierto
manos arriba
lánzame al cielo

¿puedo ser capaz de andar por mi espalda?

08 julio 2006

manos-tierra

Quiero reinventarme solo con las manos
Las mismas que hacen pan en silencio pidiendo fuego sin palabras
Pacientes mirando al cielo
Descenso de piel en pedazos

Quiero en primera persona
vivir de nosotros siempre

Recoger ceniza olvidada y el poso de noches enteras en un vaso, pendientes de abrazos limpios

Que mis manos sean lienzo y paleta: mezcla sobria o liquido infinito.
Sólo así, entre uña y carne, puedo organizar lo ilegible

Quiero reinventar el modo de ser tierra
La sórdida postura de la vida al ver la luz y los ojos de quien me mira: tus ojos de ahora

Si acaso tú fueras mis manos, ¿qué querrías tocar por primera vez?
Yo pido la palabra eterna
La constante sensación de lenguas y límites
Hervir sola recetas tristes

Pido para mi la fértil aventura de soñarse estéril e inmune
Tierra sin manos, tierra yerma que brota
Pido con el cuerpo lo que no me dejan gritar las palabras

Salto a la histeria de un mar en calma

Apolíneo


Cuando camino por los pasillos de mármol,
el suelo y la piel desgarran gritos
camino con los pies y con los dedos de las manos

camino con labios redondas lenguas
y entre las baldosas, sábanas tibias
Cuando elijo arañar sin prisa,
pequeñas grietas de mármol
nudo que no ata, fuerza que no duele
y entre el aire herido nado
goteo de sudor humilde
Cuando se me escapa una sonrisa
es porque bebo en tu leve mármol
porque comprendo mejor los segundos si los desecho a tu lado
lentitud latitud lateral
no soy menos piedra por añorar tus hombros

Momento solitarios

"Me asustan sus ojos. Me dan miedo. Cuando me mira no puedo ni respirar así que es imposible lo que me estás pidiendo. No soy capaz de acercarme a él para preguntarle siquiera la hora, ¿cómo quieres que vaya ahí, junto a sus ojos, con aire resuelto a pedirle que me invite a un café? ¿Acaso crees que las cosas son así de fáciles? Mira que eres ingenua... ¿Y si me acerco y justo al llegar tropiezo y me caigo sobre él o, peor aún, sobre su caja de pinturas? Seguro que no le hacía nada de gracia levantar los ojos de acero y ver que sus óleos habían sido echados a perder por una torpe como yo... Mírale, ahí sentado, tan tranquilo, sin saber que alguien está aquí tomando un café en esta terraza pensando en el modo de acercarse a su lado y pedirle el nombre. No puedo ir hacia allí sin más rompiendo su silencio. Él está concentrado en su lienzo y sus pinturas y sus atardeceres. Yo en mi café y mi libro. Hablando sola con varias “yos” que me hacen compañía cuando no sé qué quiero y cuando lo sé con creces.
¿Pero cómo pretendes que me acerque así sin más, sin ofrecer nada a cambio, sólo robando tiempo y luz? Me resulta absurdo interrumpirle para dedicarme a balbucear palabras que no llevan a ninguna parte. Si al menos tuviera algo, algún pincel sin usar en el bolso o alguna excusa para acercarme a mirar qué es lo que está pintando... Pero la única excusa que tengo es querer romper momentos para crear nuevos. Mejor le dejo en su momento único. Mejor no me asusto con sus ojos.
Los tiene azules, por cierto. Tan azules que parecen de agua. Son aterradores."

Espejito, espejito...

Para aprender a girar sólo necesitas tener verdaderas ganas de hacerlo y un espejo. Puedes emplear el espejo que quieras. Cualquier reflejo vale. Yo, para empezar, compré uno espejito en los chinos de abajo de mi casa (vulgarmente conocidas como tiendas de TODOa100). Era muy bonito, redondo y rojo como una pelota presumida. Cabía en la palma de mi mano. Era el espejo perfecto para empezar a girar en cualquier parte del mundo. Era tan bonito que cuando fui preguntar su precio a la dependienta mexicana del chino, me dijo que por tener tan buen gusto me lo regalaba.
Así que salí a la calle con mi espejito y una sonrisa doble muy dispuesta a girar con todos los reflejos-sorpresa que se me cruzaran por el camino.
Como te decía, girar es algo bien sencillo pero es muy importante estar atentos. Coloca el espejo a la altura de los ojos y mira bien su interior. No puedes distraerte ni un segundo y sobre todo es imprescindible no parpadear. Si eres paciente y tu deseo es constante las sombras no tardarán en aparecer por tus pupilas. Primero son como leves brumas naciendo en el fondo de los ojos. La primera vez que las vi pensé que eran fantasmas negros por su forma de bailar entre sí dentro de mi globo ocular. Sin embargo, a medida que su imagen se aclaraba en el espejo me di cuenta de que además de negros, eran felices.
Los fantasmas negros felices empezarán rápidamente a crecer a fuerza de comerse unos a otros y pronto te invadirá el primer nivel del giro. Tranquilo, sabrás perfectamente cuando has llegado a ese nivel porque en el preciso momento en que los fantasmas lo envuelvan todo empezarás a ver el mundo con colores invertidos. Ya estás a punto de girar, ¿no te resulta emocionante?
A partir de aquí ya no necesitas el espejo. Envuélvelo en un trozo de tela blanca y guárdalo en tu bolsillo. Ahora tienes que empezar a caminar del revés pero sigue tranquilo porque eso no te va a parecer nada difícil. Ten en cuenta que en este nivel ya estás mirando del revés. Sé que te vas a sorprender de lo sorprendentemente fácil que es caminar de espaldas cuando tus fantasmas miran de frente. No te va a costar esfuerzo, puedes incluso correr más rápido de este modo y, desde luego, es imposible que te tropieces puesto que tu ojos ahora abarcan 360 grados. ¿A que es genial?
Sólo te queda disfrutar de este nuevo punto de vista, de colores nuevos, de formas que no son ni redondas ni cuadradas. De líneas huecas y de líneas hinchadas. Disfruta viéndote a ti mismo desde fuera y desde dentro. Puedes salir de tu cuerpo si quieres, pero mejor no te voy a contar el secreto porque es más divertido que lo descubras por ti mismo... Oye, por cierto, ¿a ti no te gustaría volar?